Me interesa compartir los proyectos que he realizado y los procesos creativos que me llevan a construirlos.
jueves, 25 de julio de 2013
1840-2040
*ÁLBUM
DE FAMILIA
El proyecto “1840 – 2040”, de Cecilia Hurtado,
cristaliza aspectos temáticos sobre los vínculos familiares abordados en sus
dos series anteriores: la ceremonia de cortarse el pelo como señal de duelo por
la muerte de su madre registrada en la serie “El Ritual”, y “Centro 13”, conjunto en el que explora
el significado simbólico del ombligo.
Para Cecilia, la experiencia familiar se
ciñó, fundamentalmente, a la relación con sus padres y su hermana. La búsqueda
de sus raíces más profundas la llevó a conocer su pasado a través del álbum
fotográfico y de la historia oral, que le proporcionó las vicisitudes de la
vida en familia.
Emprendió el camino del retorno
de una manera singular: trastocando los recuerdos y la identidad de sus
parientes se injerta ella misma en las fotografías antiguas.
Así mediante procesos
digitales, Cecilia encarna lo mismo en su tatarabuelo, en una tía monja o
aparece en compañía de un nutrido grupo familiar.
Entre la nostalgia y la
reconstrucción, Cecilia Hurtado organiza un nuevo álbum familiar a la luz de su
vida presente. Encuentra en sus antepasados rasgos y gestos que figuran su
rostro actual, e identifica una manera de ser, de vivir el mundo. En estas
imágenes autobiográficas, la autora concilia la discordia entre la
confiabilidad de la fotografía como documento histórico y la fotografía como
creación. Es un juego de intervenciones, tiempo, memoria y familia que redunda
en la invención de recuerdos: testimonios verdaderos de su imaginación.
Gutierre Aceves Piña
*texto para catálogo de exposición en el Instituto Cultural Cabañas. Guadalajara, Jalisco 2002.
miércoles, 24 de julio de 2013
De los recuerdos que no tengo
Una versión de la serie en libro de artista, formato acordeón con uniones en piano.
Portada y caja elaborado por Su Yin Wong, 2013.
De los recuerdos que no tengo
Colecciono
fotografías anónimas como una afirmación sobre lo que queda de la ausencia. Me
gusta observar en imágenes cotidianas, ahora cargadas de significado por el
paso del tiempo, como evocan a cosas que tal vez sólo he imaginado o el vínculo
que encuentro en el diálogo entre esas imágenes y las fotografías que realizo.
Éste diálogo es una especie de código secreto que se construye a través de
asociaciones de la memoria y momentos capturados para hacer visible lo que se
desvanece por el paso del tiempo.
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